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Tradiciones que no se conservan

Bodas

Duraban tres días. Se hacía el gasto (banquete) en casa de la novia, se desayunaba allí (chanfaina y morcilla), el novio, su familia y amigos iban a buscar la novia a casa, antes de salir de casa los novios se ponían delante de los padres para que les dieran la bendición y desde allí se iba a la iglesia acompañados de un tamborilero. A la salida, los mozos llegaban con una tornadera y una morcilla pinchada en ella para dar de comer a los novios, también se les daba una vuelta por el pueblo, montados en un carro engalanado para la ocasión, y normalmente casi todos terminaban al final en las pozas. Después se comía, solía ser la comida abundante (dependiendo de las posibilidades de cada uno).

A la hora de dar la espiga, se tocaba el tamboril, cada uno la iba entregando y bailando con la novia. Si el regalo era ropa se la colgaban del hombro de la novia mientras se bailaba, si era dinero se ponía entre los dientes y la novia tenía que cogerlo.

Por la noche, los novios no podían decir donde se quedaban a dormir, por que si no les daban la paliza. Si alguno de los contrayentes era viudo, se le daba la cencerrada.

Al día siguiente era la tornaboda, se bailaba “la rosca” con tamboril, continuando la fiesta. En algunas ocasiones se hacía arar a los novios, ataviándolos con todos los aperos propios para este tipo de trabajo.
 

Entierros

Antes se repartía pan y vino entre la gente que acudía al entierro. El luto se llevaba de forma muy rigurosa, pañuelo, medias y ropa negra durante 3 o 4 años por los padres e hijos, 1 año por los abuelos y por los tíos medio año.